Serás más feliz si piensas que lo que te toca vivir es debido y es por tu bien. Nos puede costar aceptar el camino que nos corresponde.
Deberíamos intentar encontrar nuestro verdadero camino de vida, el que nos lleva a trabajar lo que traemos a esta vida pendiente de resolver. Es el camino de los buenos sentimientos, de la verdad que va con uno.
Hay una ley universal que define nuestras necesidades importantes. Aceptarlas te liberará de un estado de ansiedad y de sentir que las cosas no son justas. Si pierdes un bebé, piensa que él ha vivido una etapa desde su inicio hasta nacer que es una trayectoria muy importante, donde vuestras almas lo compartieron todo.
Hay situaciones que pueden parecer difíciles pero a largo plazo nos habremos beneficiado de ellas. La vida se desenvuelve y vives en acorde con lo vivido anteriormente, porque todo es consecuencia de algo. Construyes tu persona en base a la primera etapa de tu vida, es como una pelota de lana que se va formando envolviendo lo que aprendes en tu camino.
Acepta tu pasado de alguna manera y perdona lo que fuiste para poder cambiarlo. Acepta lo que la vida te manda y ocúpate de tu presente con la serenidad de aceptar aquello que no puedes cambiar.
